lunes, marzo 24, 2008

Mi país

Calculo que los chetos deben ser parecidos en todo el mundo. Mi problema tal vez sea que a los especímenes argentinos los reconozco fácil. Me producen una mezcla perturbadora de asco y admiración perversa.


Estoy esperando que empiece a vaciarse la cola de varios metros para abordar el vuelo a Madrid. Veo una parejita como salida de las últimas páginas de la Gente. No creo que algún día vayan a tapa. Veo sus pasaportes. Brillantes y con el escudo de la patria. Esa patria por la que papá por suerte está peleando. Esa patria que es campo, es girasol y, sobre todo, no se toca. Porque por la patria vinieron a esquiar los chicos.


Ella se luce con sus botas de cuero, pero él es recio y vino hasta el avión con botas de esquí o como se diga. Más o menos como las que usaba Robocop. Entre ambos promedian el metro ochenta y, claro, él es más alto que ella. El robusto, ella estilizadísima. Seguramente él ayudó a algún buen peón a cargar fardos durante más de un amanecer. Claro, si la patria la hacen los que trabajan. Por eso hay que salir a pelear. A las rutas, como antes los esos. Y ahora nos toca, joder. No sólo pedimos palo en su momento. Ahora copiamos, fagocitamos copiando la forma.


Ambos tienen tez amarronada. La nieve no perdona. Ese tatarabuelo tehuelche tampoco. Pero de eso no se habla. Porque los chicos están charlando ahora. De algo espléndido seguro. Pero tal vez lo más perturbador es que yo no soy ningún perdedor del modelo. Gané y gano. A mi modo. La pregunta entonces es qué me molesta. Si no ser más ganador aún. Si no exudar estilo y pómulos recios. Si realmente me irrita la hipocresía o si solamente soy un acróbata más en este circo.



3 comentarios:

Anónimo dijo...

qué buen post!!

puedo plagíar algunas partes??

Alan dijo...

Gracias :o)

Creo que prefiero la cita al plagio, pero digamos que no me ofendo

Anónimo dijo...

como ledijeron al Bambino, luego de subir con un traba a un motel "tarrrrde!"

ya te plagié. que es un homenaje, claro.

besos, acuaman!