
Se ve que eramos saprissistas, así que se puede decir que les rompimos el tujes: 3 a 0 y mucho ole ole. El clima digamos que fue, como suelen ser las cosas acá, bastante tranquilo. Un redactor malicisioso diría que como anestesiado. Pero mirá si después me acusan de chauvinista globalifóbico. La excepción tal vez fue más nominal que otra cosa: en la hinchada de La Liga (autodenominada "la 12") colgaba una cruz esvástica de tamaño considerable. La hinchada de Saprissa (autodenominada "los ultras") se cantó bastante. La mitad de las cancio nes no la entendí (como suele pasar cuando uno va a la platea). La otra mitad fue bastante jocosa. Algo así como ver una película doblada. Las eses seseadas hasta el hartazgo y el ritmo con variaciones salseras y sale un menjunge que suena más o menos así: "Vaaamosssssss (pausa) vamosssssss vamosssss moooosssssstrooooo (pausa) que essssta nocheeee (pausa) tenemosssss que ganaaaaar". Entre Sapricola y Sapricola logré adaptarme y cantar. Mitad vaso lleno. Mitad vaso lleno.
3 comentarios:
EEEpaa!... Te agarré!
Cómo es eso de "hayá por los ochenta"
Vestia pop, tendría que haberse titulado el post.
Perdón, no quiso ser mala onda el comment anterior.
Festejamos todos tu (siempre trinfal) vuelta a la pluma, o el teclado bah.
Pura vida
Los ticos se parecen, a todo lo demás que conocimos hasta ahora; o sea que son, abolutamente coherentes.
Da tranquilidad, ta muy bien.
No vaya a ser que se animen a salir de su modo; ni siquiera para el fut boll (o "soquer") -o acaso no están cooptados por USA-
Además, el deporte aquí en cuestión, seguro que lo juegan a lo tico, léase:
leeeeeeennnnnnnnnnnnto....
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