Cuando el rubio cunde
Cuando la mirada esquiva
Cuando ser imbécil cotiza
Cuando el asesino
saca a relucir su impune
barba candado
Cuando el vacío cotiza como faisán
Cuando el oído se cierra
y la boca se abre
Cuando todo es tan fácil
y el fracaso se goza
Cuando el ruego ni compra ni vende
Cuando huyo
Cuando corro
Cuando escapo
Cuando me recrimino
Cuando no soy el que nadie quiso que sea y sin embargo trato
Cuando eructo sin parar
Hoy, recién
y pensar que ya lo sabía
martes, diciembre 04, 2007
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
2 comentarios:
bravo
¿por qué mi apellido para el título?
Publicar un comentario